16 agosto, 2009

Agradecimiento

Agradezco por los días, la vida, el sol, la lluvia, los colores
Cuento con la dicha de tener cerca a mis padres y hermanos, amigos, amores
Quizás algunos me falten, pero yo los visito cerrando los ojos de vez en cuando

Soñé un poco con el recuerdo de mi abuelo, pude escuchar
- Mar denso y calma alrededor -
Al despertar recordé todo lo que solía contar a cerca del alma, la oración, rezar y estar en paz, él tan acertadamente contándome sobre el ángel de la guarda, historias insólitas aunque por demás demostrativas y ejemplares, esas pausas al hablar y una tremenda ternura en la voz. No me sale llevar por delante una ferviente fe por alguna institución religiosa-moral, pese a la lucha por despojarme de tanta consigna inexplicable, ahora tengo un momento de claridad y entiendo que la fe es el regalo que mi abuelo me deseaba mostrar, más que nombrar alguna "única" institución dueña de un credo y demás dogmas impuestos.

Me siento en comunión con quienes amo y con aquéllo que aprecio, libre de decirlo, digamos que simplemente agradecer por ello se convierte en mi oración

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Saludos Jez!
Yo sé de qué se trata eso, esque es horrible cuando pierdes totalmente la FE...

Sin ligarla a algo extrictamente religioso. Yo me he perdido a veces y es dificil recuperar cómo llegar de nuevo a ella.
Un abrazo y se feliz

Elhenmer

Jezabel Kein dijo...

Ahora deseo que me vaya acostumbrando más a menudo con su compañía, ahí anda aunque a veces se duerme la muy canija :-D

¿Es tu nombre Elhenmer?
Saludos